El Covid-19 ha supuesto un punto de inflexión en la forma de trabajar y en los modelos organizativos para muchas personas y compañías. Estos cambios han provocado una gran aceleración de la trasformación digital, que desde hace unos años venía asentándose en nuestro presente y que, a partir de ahora, será sin duda un factor crucial para conseguir el éxito en la adaptación a la nueva normalidad laboral.
Si bien el futuro se presenta más incierto que nunca, podemos estar seguros de que el llamado teletrabajo ha llegado para quedarse.
Más allá de los pros y contras que se han planteado sobre el trabajo a distancia, lo que parece indiscutible es que el mundo se encuentra inmerso en una imparable evolución estructural y tecnológica, donde la trasformación digital está reinventando la forma de hacer las cosas.
De acuerdo con nuestra área de competencia, en los próximos puntos nos dedicaremos a analizar cómo repercute esta deslocalización del trabajo en la gestión y organización laboral, lo cual afecta directamente a los departamentos de RRHH de las compañías.
La era del teletrabajo | retos y oportunidades para RRHH
¿Cuáles son los retos y oportunidades del teletrabajo para Recursos Humanos?
1. Regulación
Mientras que antes del covid-19 apenas un 5% de personas teletrabajaban en España, esta cifra se ha multiplicado hasta superar el 30% en los últimos meses, lo cual ha provocado nuevas necesidades en términos de regulación laboral. Resultado de ello es la nueva ley que regula el trabajo a distancia en España (Real Decreto Ley 28/2020), publicada en el BOE el 22 de septiembre de 2020.
El objetivo de esta nueva regulación pretende alcanzar la igualdad entre los trabajadores presenciales y los que teletrabajan, para que ambos tengan los mismos derechos, condiciones laborales, retribución, promoción y conciliación.
Exceptuando los casos en los que las organizaciones hayan aplicado el teletrabajo de forma excepcional (según condiciones del artículo 5 del Real Decreto Ley 8/2020), el resto de las compañías están obligadas a firmar un acuerdo por escrito en el que se establezcan los términos del acuerdo entre empresa y el trabajador, relativos a las condiciones del teletrabajo, tanto para los nuevos teletrabajadores como para los que ya practicaban esta modalidad antes de la norma.
Si quieres conocer en profundidad los detalles y requisitos que establece esta nueva ley, podéis encontrarlos en nuestro artículo sobre la regulación del teletrabajo.
2. Registro de jornada
Otro de los retos que plantea la deslocalización del trabajo es el registro de las horas trabajadas, ya que el control horario supone una obligación para las compañías desde mayo del 2019, regulado por el Estatuto de los Trabajadores.
La nueva ley del teletrabajo también exige a las empresas establecer y adaptar los sistemas de control de registro de jornada a la nueva modalidad de teletrabajo, ya que, por ejemplo, las máquinas de fichaje presentes en muchas compañías no serán accesibles para los trabajadores a distancia, lo que obligará al replanteamiento de esos sistemas.
Si bien la nueva ley no especifica qué tipo de sistema se debería implantar, podemos imaginar que la opción más acertada será una solución digital, puesto que permitirá al usuario acceder a la gestión desde cualquier lugar.
Gracias a la implantación de un software de registro de jornada, el proceso será más ágil, trasparente y seguro, además de ahorrar a la compañía tiempo y dinero, gracias a la integración de la información en una única plataforma, a la que los trabajadores podrán acceder tanto a través del formato web como desde una app móvil.
3. Comunicación y motivación
Trabajar desde casa puede llegar a provocar al empleado un sentimiento de desconexión con la compañía, ligado a la desmotivación y la falta de contacto personal entre compañeros. Esta pérdida de identidad se podría traducir en un menor rendimiento y la desalineación de los empleados con respecto a los objetivos de la compañía.
Por este motivo, es fundamental que los responsables de RRHH y gestión de equipos fomenten y enfaticen la comunicación y colaboración entre los trabajadores, sobre todo en compañías en las que una parte sustancial de la plantilla trabaja a distancia.
En los siguientes puntos se exponen algunas recomendaciones que los responsables de RRHH y equipos podrían aplicar para evitar que la conexión entre los empleados y la empresa no se vea perjudicada por la distancia que interpone el teletrabajo.
3.1 Fomentar la comunicación interna entre empleados
Conseguir que la comunicación entre los trabajadores se mantenga fluida es primordial a la hora de crear un ambiente de trabajo colaborativo y dinámico, y así poder evitar la pérdida de comunidad entre ellos.
Toda la compañía al día.
Conecta a todas las personas de la organización.
3.2 Reforzar el sentimiento de pertenencia
Para asegurar que los trabajadores se sigan sintiendo parte del desarrollo y crecimiento de la compañía, sin importar desde donde trabajen, los departamentos de recursos humanos deben fortalecer este sentimiento de pertenencia a la organización trasladando a los trabajadores la importancia y valor de sus funciones dentro de esta.
3.3 Escuchar al trabajador
Una de las claves para que el trabajador se sienta valorado dentro de la empresa es conseguir establecer una comunicación activa entre líderes y empleados en la que el trabajador sea escuchado por el equipo y participe en las decisiones que le conciernen.
3.4 Feedback y seguimiento
Dar feedback y reconocer el esfuerzo del trabajador es un elemento muy importante de cara a la motivación y valor de este dentro de la organización. Por otro lado, el seguimiento individualizado de los objetivos del empleado por parte de los líderes y responsables de equipo permite identificar aspectos de mejora, además de fortalecer la relación con el trabajador y su desarrollo profesional.
Evalúa las competencias.
Y establece planes de desarrollo para los empleados.
Marketing & Communication Manager. Coordina el departamento de Marketing en Endalia.