¿Sabías que dependiendo de lo que dictamine un juez podemos diferenciar varios tipos de despido? El más común de todos es el despido procedente: un tipo de despido justificado por parte de la empresa.
Sin embargo, en ocasiones, los empresarios son incapaces de demostrar los incumplimientos de contrato, llevando adelante despidos improcedentes. En este artículo, queremos ahondar en el despido improcedente: en qué consiste, cómo se regula, a cuánto asciende la indemnización, así como su cálculo.
Despido improcedente: regulación, indemnización y cálculo
¿Qué es el despido improcedente?
El despido improcedente es la decisión unilateral de la empresa cuando concluye la relación laboral con un trabajador sin contar con los requisitos legales necesarios para su despido, tal y como lo estipula el artículo 56 del Estatuto de los Trabajadores.
De este modo, se determina como despido improcedente en el momento que se impugna ante instancias judiciales y, como consecuencia, la empresa tendrá que sufragar la indemnización o el reingreso del trabajador.
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¿Cómo se determina la improcedencia del despido?
La improcedencia de un despido es determinada por un juez, encargado de valorar los hechos y las causas de dicho despido.
Pero, ¿cuándo un juez verá que se trata de un despido improcedente? Por norma general, tras estos 2 supuestos:
- El empresario ha incumplido los requisitos legales: Por ejemplo, si no entrega la carta de despido o en un ERE no celebra las consultas previas al despido colectivo.
- El empresario no está acreditado con causas legales: Esto ocurre cuando la empresa despide a un trabajador de baja, por ejemplo.
¿Cómo reclamar un despido improcedente?
Si el trabajador o trabajadora recibes la carta de despido y no está de acuerdo con la decisión, debe firmar la carta incluyendo al lado de la firma la siguiente frase: “NO CONFORME”.
A continuación, el trabajador debe impugnar el despido ante un tribunal laboral en un plazo de 20 días hábiles a partir de la fecha del despido, presentando una papeleta de conciliación laboral y, en caso de que no se produzca con la empresa, se verá obligado a demandarla. Para ello, es importante contar con el apoyo de un abogado laboralista.
¿El trabajador tiene derecho a paro?
Por supuesto. En caso de despido improcedente, el trabajador o trabajadora tendrá derecho a paro o subsidio, siempre y cuando cumpla los requisitos para ello (tiempo de cotización, haberse inscrito como demandante de empleo…).
Consecuencias del despido improcedente para la empresa
En el momento en que el despido se declara improcedente por parte del juez, la empresa tiene un periodo de 5 días para elegir entre una de estas dos posibilidades:
Readmisión del trabajador o trabajadora
Si la empresa opta por esta opción, el empleado deberá volver a su mismo puesto laboral y en las mismas condiciones que tenía antes del despido. Además, el empresario tendrá que pagar los salarios de tramitación. Es decir, los días desde el despido hasta la readmisión a su puesto.
De este modo, si el trabajador fue despedido en el mes de abril y el despido se declara improcedente en noviembre. La empresa tendrá que readmitirlo y pagarle los sueldos de abril, mayo, junio, julio, agosto, septiembre y octubre.
Por lo tanto, si el empleado es readmitido, deberá reembolsar la indemnización a la empresa.
Pagar la indemnización por despido
El empresario se verá obligado a pagar la indemnización por despido improcedente, que es diferente a los otros tipos de indemnización. Por ejemplo, la del despido objetivo.
En caso de que la empresa no manifieste ninguna de las opciones, se entenderá que optó por la readmisión del trabajador y que este podrá volver a su antiguo puesto de trabajo. Pero si el trabajador o trabajadora es representante legal de los trabajadores o delegado sindical, será el propio empleado el que decida si se desea la indemnización o la reincorporación.
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Indemnización por despido improcedente
Antes de nada, cabe señalar que finiquito e indemnización no son lo mismo. Y queremos reiterarlo, puesto que es un fallo bastante común. Un finiquito es el documento que se abona en el momento de extinción del contrato, una obligación que se puede dar tanto en despidos como en casos de baja voluntaria, sin ir más lejos.
En cambio, una indemnización es un derecho laboral en caso de despido. De ahí que, por ejemplo, en un despido disciplinario no se contemple. Pero en un despido improcedente la indemnización es obligatoria. Ahora te contamos cómo se lleva a cabo su cálculo.
Despido improcedente: cálculo
¿Cómo calcular la indemnización del despido improcedente? Normalmente, equivale a 33 días de salario por año trabajado, con un límite de 24 mensualidades.
No obstante, si el contrato de trabajo es anterior al 12 de febrero de 2012, todo ese tiempo previo se contabiliza por 45 días por año trabajado, con un límite de 42 mensualidades.
Por consiguiente, si este año se procediera al despido improcedente de un trabajador que comenzó en el año 2000 en una empresa, habría que contar, por un lado, del 2000 a 2012 y, por el otro, del 2012 a la fecha del despido.
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Marketing & Communication Manager. Coordina el departamento de Marketing en Endalia.